sábado, 16 de febrero de 2013

SESIÓN DEL 14/02/2013: LA IMPROVISACIÓN



Como uno de los componentes del grupo no pudo participar en la última sesión práctica, hemos podido añadir una visión externa de las actividades realizadas y el efecto que han causado en los compañeros.

En la primera fase y a modo de calentamiento, se jugó al Comecocos. Tan solo podían desplazarse siguiendo las rayas marcadas en el suelo y esto provocaba a menudo encontronazos divertidos y técnicas de esquive muy graciosas. En su conjunto, ver a los compañeros moviéndose sin cesar e intentando evitar ser pillados entre risas, gestos y gritos, fue muy entretenido y además se notaba que se lo pasaban en grande.

Otro ejercicio fue el del Cíclope. Nada más oír la explicación, las caras de los compañeros se convirtieron en todo un poema. Algunos reían, otros agitaban las manos como diciendo "madre mía" y otros pocos se echaban hacia atrás como intentando escapar de aquello. Está claro que la gran mayoría, al menos al principio, mostraba timidez y vergüenza, ya que tenían que acercarse mucho a la cara de los compañeros y entraba en juego la improvisación de cada uno de ellos, dando lugar a movimientos inesperados. No obstante, a los pocos minutos, todos parecían más relajados y daba la impresión de que se dejaban llevar por el momento. Pasó de ser una actividad algo incómoda a un juego de complicidad y coordinación. 

Después de esto, la siguiente actividad consistió en moverse libremente por el espacio limitado (medio campo) simulando que una parte del cuerpo les arrastraba y ellos se dejaban llevar. Visto desde fuera, parecía que se libraba una batalla dentro de ellos mismos, como si algo les empujara y ellos se resistieran. El efecto era peculiar pero divertido y resultó curioso ver las partes del cuerpo que escogían algunos de los compañeros para dejarse arrastrar: un pie, el culo, la mano, la cabeza, un codo...

Después de esto y con el fin de tomar un poco de aire, vimos un vídeo sobre una actuación de David Zambrano junto con otros muchos bailarines importantes. Lo singular de esta actuación era que estaba basada en la improvisación de los componentes. Se movían por el espacio jugando con la luz y las sombras, mediante giros, espirales, cambios de ritmo y con más recursos que los compañeros apreciamos que justamente habíamos tratado en las actividades anteriores. En definitiva, se dejaban llevar por las circunstancias del momento, siempre abiertos a cualquier detalle que les inspirara un movimiento u otro, abiertos a la improvisación.  

La siguiente actividad consistiría en tomar como modelo el vídeo e intentar reproducirlo siguiendo, como no, el instinto de cada uno y la espontaneidad.  El resultado fue mejor de lo esperado, pues todos se sintieron bastante cómodos y compenetrados a la vez que disfrutaban.


Con el fin de probar nuevos movimientos, repitieron el ejercicio de improvisación. Al igual que en la anterior vez, con la música del vídeo de fondo, pero cambiaron la manera de empezar. En la primera tomaron como inicio el ejercicio del muelle, practicado en clases anteriores. En esta ocasión, comenzaron desde el suelo, dando más juego a la hora de moverse, ya que podían levantarse de inmediato o continuar unos minutos en el suelo. 

Después de esto, se propuso hacer una improvisación con la misma música e intenciones pero en el hall de la Universidad, con espectadores y con otro espacio y elementos arquitectónicos distintos a los del gimnasio. Además también se sugirió que fuera grabado en vídeo para poder analizarlo después y poder llevarnos un bonito recuerdo de la experiencia. Parece ser que la idea gustó, pues nos pusimos de acuerdo para vestir ese día todos de negro e incluso marcarnos la cara con pintura y así causar mayor sensación de grupo.

Tras concretar los detalles del proyecto que llevaremos a cabo el próximo jueves en el descanso, aquellos compañeros que tenían antifaz se acostaron con los ojos tapados, quedando en completo silencio y sin poder moverse. El resto debían desplazarse entre ellos a distintos ritmos para que éstos lo oyeran, tocarlos, moverlos, cambiarlos de posición, etc. con total libertad, de la manera que ellos quisieran o lo que les sugiriera. Los que se encontraban tumbados con los ojos tapados dijeron al finalizar la actividad, que había sido muy relajante a la vez que inquietante.




Para finalizar, por grupos y en 15 minutos tuvieron que preparar un ejercicio donde utilizaran el espacio que les rodea y jugaran con sus elementos, que no eran pocos, pus tenemos la enorme suerte de tener un gimnasio con una disposición muy positiva para realizar este tipo de montajes: una larga rampa, una cristalera opaca que proyecta sombras vistas desde el interior, una mesa con ruedas, pizarras, escaleras, columnas, etc. Algunos de los grupos quisieron mostrar sus interpretaciones al resto. Fue muy divertido y los montajes fueron muy originales. Todos coincidimos en que la cristalera de la entrada y el juego con las sombras fue espectacular, el resultado era asombroso.

jueves, 14 de febrero de 2013

ISADORA DUNCAN: DIOSA DE LA DANZA MODERNA


Isadora Duncan es considerada por muchos la madre de la danza moderna dejando un gran legado en esta disciplina. Bailarina, coreógrafa, maestra de baile, pensadora y creadora de una de las primeras técnicas de la danza moderna, no solo tuvo una vida bastante atormentada sino que sucumbió de forma trágica e incluso se diría que irónica.

Nació en la primavera de 1878 en San Francisco y desde muy temprana edad, la pequeña Dora Angela, que pasaría a llamarse Isadora más tarde, tuvo que enfrentarse a graves problemas. Su familia estaba arruinada y su padre acabó en la cárcel acusado de fraude bancario. Pero el ambiente musical promovido por su madre, que se encargó de educar a sus hijos y, de paso, intentó ganar algo de dinero impartiendo clases de piano, hizo que a la futura bailarina se le colara el ritmo en lo más profundo de su alma. Tan solo con cinco años, Isadora enseñaba a bailar a las niñas de su vecindario, diciéndoles que movieran los brazos como si fueran las olas del océano. Ya entonces mostraba una sensacional capacidad para la danza.

Isadora Duncan tenía una fuerza de voluntad inquebrantable: surgió de la nada, aprendió sola, luchó contra todo tipo de obstáculos y, finalmente, triunfó. Su estilo de danza era radical, novedoso, fresco y, precisamente por su descarada naturalidad, se convirtió en uno de los iconos del siglo XX. Tuvo que aguantar críticas destructivas, abucheos y hasta insultos, pero marcó toda una época. Sus bailes cargados de sensualidad con movimientos libres y fluidos que expresaban emociones internas, causaron gran expectación en la sociedad del entonces, la cual consideraba que eran más propios de invocaciones a Satán que de una jovencita con ansias de triunfar. Eligió el feminismo entre la presión calvinista y el credo católico. Le encantaban los cánones de belleza de la antigua Grecia inspirándose en ellos y en sus danzas tradiciones y bailes sociales. De ahí que en sus actuaciones vistiera con túnicas transparentes y con los pies, brazos y piernas desnudos y su largo cabello suelto. Pero Isadora no sólo se centró en crear coreografías y desarrollar una nueva técnica de baile. Compartía una visión de la danza como expresión vital de la vida misma. Promovía una filosofía donde la danza ocupaba un lugar sagrado. Y es que Isadora era así en todos los aspectos de su vida, imprevisible, libre y alejada de los convencionalismos. 

En 1890, Isadora empezó a bailar para la compañía San Francisco Barn Theatre. Después de vivir brevemente en Chicago, se mudó a la ciudad de Nueva York, donde empezó a trabajar para la compañía Augustin Daly. Estos primeros intentos artísticos no tuvieron demasiado éxito. En 1899, se mudó a Europa junto a su familia. Primero vivió en Londres y luego se trasladó a París. Fue entonces cuando su extravagante estilo empezó a llamar la atención, desarrollando una nueva forma de baile al compás de la música de grandes compositores como Beethoven, Mozart o Chopin.

Tuvo una hija con el escenógrafo británico Gordon Craig y un hijo con el magnate de las máquinas de coser Paris Singer. Pero desgraciadamante, los dos niños fallecieron en 1913 en un accidente de coche. En 1922, se casó con un poeta ruso, Sergei Esenin, mucho más joven que ella aunque aquel romance no duró demasiado. Tras varios meses recorriendo Europa desenfrenadamente con su amada entre alcohol y lujo, el chico acabó suicidándose, o asesinado según otros. No obstante, y para colmo de muchos, Isadora decidió ser madre soltera y allá donde iba dejaba un rastro de escándalo y morbosos chismorreos, para deleite de los periodistas. Sus líos amorosos con poetas o actrices destaparon su bisexualidad que terminó por convertir su figura en algo singular, odiada e idolatrada a partes iguales.

Con todo, su muerte no fue menos sonada y conocida que su vida, falleció de un modo insólito e intrigante. El 14 de septiembre de 1927, Isadora se encontraba en Niza acompañada por unos amigos. Uno de ellos, quien se dijo que era uno de sus múltiples amantes, un atractivo mecánico italiano, sugirió dar un paseo en automóvil. El coche, un Amilcar, a quien la propia bailarina apodaba alegremente como "Bugatti", no se trataba realmente de un automóvil en toda regla. Era un ciclocar muy de moda en la época, de escasa potencia pero aspecto deportivo, en definitiva descapotable. Pero a pesar de su inofensivo aspecto, se convirtió en un arma letal. Isadora, "la diosa del ritmo moderno", tal y como fue llamada por muchos, vestía con su habitual lujo, incluyendo un echarpe de seda en el cuello, rodeándoselo con dos vueltas. Éste se agitaba libremente al aire de la marcha y todo sucedió en apenas un instante: la pieza de seda topó por casualidad con los radios metálicos de una de las ruedas traseras y se atoró, provocando un efecto  inmediato. El pañuelo se tensó, estrangulando violentamente a esta leyenda de la danza, convirtiéndola en el mito que es ahora.

El legado de Isadora se conserva hoy día gracias a la labor de sus discípulas. Las Isadorables, como así se hacían llamar, eran las alumnas más destacadas de la escuela que Isadora fundó en Alemania y fueron clave en preservar los dotes de ésta. Durante mucho tiempo trabajaron con ella, haciendo presentaciones en Europa y Estados Unidos. Estaban muy unidas, hasta tal punto que todas ellas decidieron adoptar el apellido Duncan.

En la actualidad, hay varias instituciones dirigidas por discípulas de algunas de las Isadorables. Se dedican a presentar las coreografías que aún se conservan de ella y a enseñar su técnica. Una de las más prestigiosas es The Isadora Duncan Dance Company, fundada en 1978 por Lori Belilove. Es conocida por ser la mejor intérprete de las obras de Isadora, ya que estudió con dos de las Isadorables: Anna Duncan e Irma Duncan.





Coreografía interpretada por Loli Belilove, discípula directa de las Isadorables.

martes, 12 de febrero de 2013

VOLVER A DIVERTIRNOS

Después de llevar ya unos cuantos años de carrera creo que todos necesitábamos una asignatura como esta. La clase ha comenzado haciendo un repaso de los diferentes contenidos que tenemos que tratar en la asignatura y en la asignación de un trabajo que tendremos que elaborar cada uno en nuestro Blog para el próximo jueves.

Más tarde, hemos bajado al gimnasio para llevar a cabo la sesión de hoy que consistía en una serie de juegos que podemos clasificar como juegos de confianza y de seguridad en uno mismo y en los compañeros de clase.

En primer lugar, para calentar, hemos jugado a “la bomba”,  un juego que consistía en realizar un corro e ir pasando una pelota hasta que un compañero que se encontraba en el centro del círculo gritara bomba. En ese mismo instante los compañeros que tuvieran la pelota quedaban eliminados. Este juego ha sido muy divertido y muy interesante porque hemos añadido la variante de que el compañero del centro fuera Gonzalo, que por culpa de una lesión tiene que realizar la clase en silla de ruedas.
De esta manera hemos podido comprobar cómo podríamos adaptar una actividad para niños con necesidades educativas especiales.

A continuación hemos comenzado con los juegos de confianza que estaban preparados para esta clase:

-        El primer juego ha consistido en juntarse por parejas. Uno de cada pareja debía taparse los ojos con el antifaz que nos compramos y dejarse guiar por el otro miembro de la pareja.

-        El segundo juego consistía prácticamente en lo mismo, pero esta vez la actividad había que llevarla a cabo corriendo. Con esto el grado de dificultad aumentaba y había que tener cuidado con los posibles choque o caídas.

-        Y por último, el tercer juego era lo mismo pero llegaba un momento en que tu pareja te abandonaba y otros compañeros eran los que te guiaban y te llevaban.



Estos juegos han sido muy divertidos y enriquecedores. Con ellos nos hemos divertido y hemos experimentado multitud de sentimientos. Por ejemplo lo difícil que es no ver nada y darte cuenta de que tienes que confiar en una persona ajena para que ejerza esa función por ti. Además llega un momento en el que te sientes abandonado y no sabes que hacer hasta que llega otro compañero y te vuelve a guiar.

Para concluir la clase hemos realizado una dinámica sobre la simultaneidad, que se puede definir como la coincidencia de dos hechos que ocurren a la vez en el mismo tiempo. La actividad ha consistido en preparar un ejercicio entre dos personas. Ambos tenían que ser capaces de realizarlo a la vez.




¡Esperamos con ilusión la siguiente clase!

MANU

lunes, 11 de febrero de 2013

A REFLEXIONAR SE HA DICHO


Como primera entrada en nuestro Blog, queremos invitaros a ver este vídeo, ya que en estos tiempos que corren quizá a muchos no nos venga mal un poco de motivación a través de la autoreflexión.

En él se ofrece una visión del mundo que seguramente muchos tuvimos una vez, de muy pequeños, pero que hemos dejado un tanto apartada. No hay que olvidar que como futuros docentes tenemos una gran responsabilidad. Debemos atrevernos a innovar, a progresar, a avanzar, creyendo en nosotros mismos. Y debemos transmitir esta confianza a los que nos rodean, a los más pequeños. 


Un vídeo muy interesante que seguro os hará reflexionar de alguna manera y os animará a plantearos nuevos retos o incluso a intentar cumplir aquellos sueños de los que en su día desististeis.





BEA